Una importante empresa pública acaba de divulgar su estrategia de Bitcoin el 14 de diciembre: sus reservas de Bitcoin, combinando las participaciones actuales y el capital asignado para futuras adquisiciones, alcanzaron aproximadamente los 75,5 millones de dólares. No es una cantidad pequeña: representa el 97,5% de la capitalización de mercado de la firma según el precio de cierre del 15 de diciembre. La medida señala cómo los actores de las finanzas tradicionales están tratando cada vez más a Bitcoin como un activo de tesorería en lugar de una apuesta especulativa. Con una adopción institucional de esta escala, estamos viendo un cambio estructural en la forma en que las corporaciones ven los activos digitales, no como posiciones experimentales, sino como componentes legítimos de la cartera. Este tipo de asignación en el balance por parte de entidades cotizadas tradicionales continúa redefiniendo la dinámica del mercado.