Si en 2015 compraste 10,000 dólares en Ethereum, ¡felicidades, ahora tienes 200 millones de dólares!

Pero el proceso fue así: primero pasaste de 10,000 a 1,000,000 de dólares sin hacer nada,
luego a 14 millones de dólares, sin hacer nada, y luego se redujo a 300,000 dólares, sin hacer nada,
luego a 30 millones de dólares, sin hacer nada,
luego se redujo a 1,2 millones de dólares, sin hacer nada,
luego a 93 millones de dólares, sin hacer nada,
luego a 5,3 millones de dólares, sin hacer nada,
luego a 323 millones de dólares, sin hacer nada, y luego se redujo a 200 millones. ¿Puedes aguantar?

La inversión que más pierde la gente común es el tiempo.

Estás dispuesto a gastar 3 horas comparando precios para ahorrar 50 yuanes,
pero no quieres gastar 300 yuanes en un curso,
para ahorrar 100 horas de exploración en el futuro.

Te quedas despierto hasta tarde viendo series,
pero dices que no tienes tiempo para hacer ejercicio 20 minutos.

El tiempo es tu mayor capital, y el que no se puede volver a crear.
Y siempre lo estás usando para intercambiar la felicidad más barata
y el arrepentimiento más caro.

La verdadera pobreza es tener un saldo de tiempo insuficiente
y no generar interés compuesto.

El único camino para que la gente común dé un giro a su vida
es expandir locamente la proporción de inversión en tiempo en su cuenta.

Haz que el tiempo de hoy cree más tiempo, mejores oportunidades y mayor valor para mañana.

Eso es interés compuesto en el tiempo.

Así que, no preguntes más a dónde fue mi tiempo,
sino: ¿pagué una hora para comprar mi futuro o solo cumplí con mi presente?

Cada minuto que eliges ahora
es tu cotización final para tu vida futura.