Tras casi diez años en el mundo de las criptomonedas, los dos últimos años fueron una dura lección con los contratos.

Es probable que muchos hayan visto escenas sangrientas como esas: justo cuando recargas el margen, te vuelves a ocupar de otras cosas y al mirar el móvil, tu cuenta ya está en ceros.

Luego, poco a poco, entendí que el verdadero problema no es lo brutal que sea el mercado, sino que mi mentalidad era demasiado impaciente. Siempre pensando que si esta operación se recuperaba, sería una ganancia enorme. ¿Y qué pasa? Cuanto más aprietas, más cometes errores; cuanto más errores, más pérdidas.

Ahora no me considero un experto, pero al menos en estos años no he vuelto a experimentar la desesperación de una liquidación total. Como ya he sufrido pérdidas, quiero decir algunas verdades a los nuevos que acaban de entrar en este mundo.

**Cuando estás atrapado, debes aceptar la derrota.**

Muchos, al verse atrapados, lo primero que hacen es aumentar la posición, apostando a que puede rebotar. En nueve de cada diez veces, esa estrategia solo te hará hundirte más. La idea de añadir a la posición es gestionar el riesgo, no apostar a que se multiplicará por diez. Cuando empiezas a soñar con ganancias enormes, ya has perdido la razón.

**Cuanto más tranquilo esté el mercado, mayor será el riesgo.**

Frecuentemente veo fases de consolidación después de una gran subida, y mucha gente piensa que la tendencia seguirá fuerte. Pero en realidad, eso suele ser una preparación para la próxima corrección. Después de una subida prolongada, inevitablemente llega un ajuste; esa es la ley del mercado. Cuando empiezas a ver a otros mostrar sus beneficios, en ese momento debes estar más alerta.

**La posición es la línea de vida.**

Estar completamente en largo significa que no tienes margen para mover tus fondos, y si cometes un error en la evaluación, básicamente estás fuera. Una gestión adecuada del tamaño de la posición te da la oportunidad de cometer errores y seguir en el juego, permitiéndote durar más tiempo.

**Y por último, está la mentalidad.**

Este juego no se trata de quién hace operaciones más llamativas, sino de quién puede controlar mejor su propia naturaleza humana. No te vuelves arrogante cuando ganas, ni te asustas cuando pierdes. Solo así podrás mantenerte firme en el mercado y avanzar más lejos.

Ve despacio, comete menos errores y el dinero podrá quedarse en tu bolsillo. Si vas con calma, llegarás más lejos.